Ocultamiento de la enorme crisis social y democrática

2012/09/05
berriro2.jpg
Esta es la segunda entrega de un total de cuatro artículos/diapos que os vamos a ofrecer para la preparación de la hulega del 26S. En ella se habla de las condiciones especiales que existen para que puedan aplicar las brutales políticas de ajuste que están aplicando. Después de ésta vendrán "Las medidas del 13 de julio y la convocatoria de Huelga General" y "La utilidad y urgencia de la movilización".

Artículo anterior: Política de shock para una nueva fase de acumulación de capital

Ver presentación de diapos

 

Que desaparezca del debate público el drama social presente y futuro

Más de 215.000 parados ya en Euskal Herria, y una parte creciente de ellos sin prestaciones

La participación de los salarios en el PIB está cayendo

El porcentaje de contratos eventuales sigue siendo el mismo reforma tras reforma

Miedo, terror a perder el empleo, riesgo de exclusión social y consecuente sumisión, explotación...

Ocultar lo que todo el mundo sabe

A saber, que estas políticas no solucionan, sino que agravan la crisis

Ninguna de las reformas (laborales o de pensiones), ni los recortes, ni las cinco reformas del sistema financiero solucionan la crisis, ni generan empleo, ni hacen circular el crédito

Criminalizar la protección social y la pobreza

Visibilizarla socialmente como un fraude y culpabilizar a los pobres

El problema no sería el sistema, sino los vagos y maleantes

Siete expresiones de la corrupción de la democracia a que asistimos

Falta de transparencia: las ruedas de prensa de los gobierno son mentira, luego hay que leer atentantamente los boletines. Recordar que gobierno español le contesta a Amaiur que el listado de tenedores de deuda soberana es información reservada.

Decretazo vs. parlamentarismo: las políticas de shock no se debaten y deciden en los parlamentos. El gobierno publica decretos leyes que luego se convalidan (una figura legal que estaba pensada para excepcionales situaciones de urgencia). A ello hay que añadir la utilización del carácter básico de las medidas

Nocturnidad y utilización fraudulenta del tempus político. Uso de los períodos vacacionales y festivos, así como la utilización de las fechas electorales.

Enorme dificultad para impulsar la acción judicial y la exigencia de responsabilidades a los actores políticos y económicos.

Control absoluto de los medios de comunicación (privados y públicos) que imposibilitan que las alternativas tengan su espacio en el ámbito de la opinión publicada

Secuestro de los partidos políticos y el sindicalismo sistémico vía financiación. Ahí está el informe Greco en relación con la financiación de partidos y los recortes en las múltiples fuentes de la financiación de los sindicatos sistémicos

Concentración vertiginosa de los centros de poder. No sólo la enorme concentración financiera y bancaria (desaparición inaudita de entidades). También las propuestas de reducción de parlamentarios, de medios de comunicación públicos, de concejales y hasta la reducción de liberados sindicales buscan, en gran parte, una reducción sustancial de los ámbitos de decisión que facilite el control y el pensamiento único para llevar a término la “política única”.